Barrio encendido

La madrugada del miércoles quedé dormido y me despertó un gran bullicio, pensé que la casona en ruinas de al lado de mi casa se había venido abajo, felizmente no fue así; el voluminoso Peraza había incrustado en el graderío izquierdo del Foro Sol un rompimiento adentro.
Hasta el monaguillo de la casita bonita de enfrente salió a la calle dando gritos y haciendo cabriolas.
Dos soles y luna y media después, ocurría lo mismo. Cepeda culminaba su actuación en tierras aztecas mandando la esférica por donde único no la había sacado allí, la pradera central.
Entonces, en los mismísimos escalones de la funeraria de Calzada y K, vi sonreír a una señora vestida de negro: una indiscreción de los trabajadores de ese recinto sagrado, le había permitido escuchar por radio lo sucedido; nocaut a México.
De día en la gran peña beisbolera del agromercado La Yaya habla de todo; la severidad de los árbitros, en su mayoría norteamericanos, la mala transmisión de béisbol que hacen los mejicanos, quienes debieron contratar a los cubanos que emitieron la pelota desde Beijing.
También critican a Héctor y Modesto, porque no llevaron prismáticos para ver e informarnos de los cambios que iban ocurriendo, por sus desconcentraciones intermitentes.
Higinio es un mambí inteligente y osado, opina la mayoría..
Soy testigo que en las casas de mi barrio los fanáticos y aficionados al béisbol se bañan, comen y se ponen desde temprano short, camiseta y chancletas.
Anoche fui en casa de mi vecino Boris a buscar hielo para rebajar mi traguito, y me lo encontré frente al espejo vistiendo un mono del equipos Cuba que adquirió no se donde.¡Será posible, le dije!
Ahora se habla de que Cepeda, Gourriel, Peraza, Michel, Olivera y los dos alazanes, así le dice a Céspedes y Despaigne, acabarán con el picheo de Japón, para luego enfrentar al mismísimo diablo si se le ocurriera lanzar en San Diego.
Por su parte, Yamila, no quiere dejar nada al azar y se está moviendo desde hace algunas horas jabas en mano, para reunir entre los vecinos la mayor cantidad de ofrendas para sus santos, que ahora –destaca- son de todos.
En lo que a mi respecta, orienté a la ¨la doña¨ (bajo amenaza real de separación definitiva) que nadie me molestara este domingo a partir de las 16:00 hrs y hasta que concluya el juego contra Japón. No pierda el tiempo en llamarme por teléfono, le saldrá la contestadota y mi móvil estará apagado.
Tampoco moleste a mis vecinos, mi barrio está encendido.